El 2 de agosto de 2017 supuso un antes y un después. No sólo en el FC Barcelona, también en el panorama fútbol en general. El club catalán confirmó que Neymar les ha informado que quiere abandonar el equipo. Su destino será el Paris Saint-Germain. Ahora se abre el periodo en que el equipo que entrena Ernesto Valverde debe encontrar el recambio de uno de los mejores futbolistas del mundo.
El Barcelona ya ha asegurado que no negociará. Se remiten a la cláusula de rescisión, fijada en 222 millones de dólares desde el pasado 1 de julio. De pagar la cláusula, el club tendrá un dinero pocas veces visto para firmar a un par de piezas de nivel mundial. Ahora surgen los problemas. El primero es muy simple; cualquier club al que el Barcelona quiera ficharle un jugador, sabiendo el dinero que tiene, le exigirá un precio muy por encima del valor del jugador en cuestión. El segundo es que apenas queda un mes de mercado de fichajes, y las prisas nunca son buenas consejeras. El tercer es encontrar la(s) pieza(s) que se acerquen al nivel que ofrecía Neymar en el equipo.
Ángel Di María
El talento que tiene Ángel Di María está fuera de toda duda. Campeón de Europa y uno de los líderes de este Paris Saint-Germain. Su alta ficha invita a pensar que podría salir del equipo parisino. Incluso si el club blaugrana aceptase negociar con el PSG, podrían incluir al jugador en el trato para así ahorrarse, además, los impuestos que conllevan el pago de una cláusula de rescisión.
Con 29 años, está en la plenitud de su carrera, aunque en una plantilla con una delantera donde Messi y Suárez alcanzan ya los 30 años, quizás sea una opción un tanto plana, ya que seguiría envejeciendo la plantilla -Neymar tiene 25 años-.
Philippe Coutinho
El actual jugador del Liverpool es el favorito de la directiva culé. El club británico no quiere que salga el que será la estrella del proyecto de Klopp este año en la vuelta a la Champions League. Bien es cierto que a base de soltar dinero podrían conseguirlo, pero nunca saldría por debajo de 100 millones de euros, más sabiendo el Liverpool la ingente cantidad de dinero que tiene el FC Barcelona. Es un jugador que podría adaptarse al 4-3-3 clásico del Barcelona, partiendo desde la zona izquierda para buscar el centro. Aportaría calidad, desborde y goles, cumpliendo, quien sabe, la función de Neymar en la disciplina azulgrana.
Paulo Dybala
Vieja aspiración del FC Barcelona. Su llegada provocaría, de primeras, el abandono del 4-3-3 para pasar a un 4-2-3-1 donde se incrustaría detrás de Luis Suárez. Este esquema provocaría quebraderos de cabeza a Valverde, porque obligaría a dotar de músculo el centro del campo, uno de los problemas actuales del equipo, por eso trataron de firmar a toda costa a Verratti. Las cifras que pediría la Juventus por su gran perla de 23 años serán desorbitadas, se han llegado a hablar de 140 millones de euros por el argentino.
Antoine Griezmann
La estrella del Atlético de Madrid ha sido uno de los jugadores que han copado los titulares en la primera mitad de la pretemporada. El Manchester United se lanzó a por él, pero terminó rechazando la oferta y renovando al alta con el club del Wanda. El Atlético es difícil que venda, más con la sanción FIFA todavía presente, pero su cláusula es de 100 millones de euros y el Barcelona tendrá dinero de sobra para firmarle.
Ousmane Dembelé
La perla del Borussia Dortmund es otro viejo reclamo del FC Barcelona. El Real Madrid parece haberse entrometido y esto podría provocar otra subida en el precio del jugador francés de 20 años. Es un portento físico, eléctrico, con gol y que deslumbra desde hace dos años en el Signal Iduna Park. Se ha hablado incluso que el jugador estaría intentando forzar la situación para salir este mismo verano de Alemania y recalar en el club español. Las cifras, una vez más, estarán por encima de 100 millones de euros.